Un día hace mucho tiempo atrás con todo el dolor que significa decir adiós cerré una puerta, sin siquiera imaginarme que lo mejor estaba detrás de ella, sin imaginarme que detrás de ese gran portazo que tanto me costo dar estabas vos en la misma situación que yo esperando que algo o alguien te rescate. Nos miramos desorientados, sin saber que iba a ser de nosotros, sin saber que sucedería de ese momento en mas, pero sin descartar nunca la posibilidad de un mañana juntos. Hoy después de tanto tiempo estamos parados en ese mañana que ayer parecía estar lejos, hoy después de tanto tiempo seguimos parados en el mismo eje. Hoy te aferraste a mi y yo me aferre a vos como nadie se lo hubiese podido imaginar. Te volviste tan MIO, como una función inconciente de mi cuerpo, tan arraigado dentro de mi como respirar o pestañear. Te llevo feliz en cada pedacito de mi piel, porque en cada rincón de ella hay algo de vos. nadie me dijo que ibas a estar ahí esperando por mi, nadie te advirtió de que iba a ser yo la luche con vos a la par para que tus fuerzas no se den por vencidas. NADIE! Pero alguien alguna vez dejo esto escrito en algún lugar, alguien nos dirigió hacia el mismo lugar aquel día que te vi. Estuve 22 años esperando por vos y al fin te encontré, al fin te tengo conmigo, al fin obtuve mi recompensa. Al fin entenderemos que no hay mal que por bien no venga y que no hay tempestad que dure 100 años, porque al fin y al cabo lo bueno siempre se esconde detrás de lo malo. Eso lo aprendí de vos. Gracias por eso y por no dejarme sola nunca mas!